Con la llegada estimada del fenómeno El Niño, las temperaturas globales aumentarán y serían potenciadas por los gases de efecto invernadero.
La Organización Meteorológica Mundial anunció que, con base en los datos que, recolectados en este momento entre 11 institutos, “hay un 98% de probabilidades” de que los próximos cinco años se registre el periodo más caluroso en la historia de la organización.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) destacó que los gases de efecto invernadero y el fenómeno meteorológico de El Niño, juegan un papel importante en la potenciación de los efectos previstos.
El Niño es un fenómeno natural asociado a los cambios de temperatura en la parte central y oriental del Pacífico ecuatorial y tiene efectos en todo el mundo, causando severas sequías en unas partes y fuerte lluvias e inundaciones en otras. En general, este fenómeno tiende a calentar la temperatura mundial, frente a su contraparte La Niña, que tiende a enfriarla. Este último fenómeno había estado ocurriendo persistentemente durante los últimos tres años. Sin embargo, los expertos han indicado que ya se ha dejado de manifestar, de acuerdo con las Naciones Unidas y su organismo especializado en meteorológica mundial.
“Los cambios más dramáticos que esperamos que sucedan se ven en el Ártico, donde ya hemos visto más del doble del calentamiento global. Y durante los próximos cinco años, la estimación es que las temperaturas del Ártico serán tres veces mayores que los promedios globales, así que veremos impactos más dramáticos allí”, explicó Petteri Taalas, Secretario General de la Organización Meteorológica Mundial.
Y aunque los fenómenos de enfriamiento y calentamiento son naturales, el impacto de los mismos se ve potencializado por los efectos de la contaminación ambiental mundial, en especial, por los gases de efecto invernadero que, debido a su densidad, encapsulan el calor y aumentan la temperatura global. Aún con el fenómeno de enfriamiento de La Niña, los últimos ocho años han sobrepasado el récord de temperaturas máximas, así, se estima que el cambio natural de las corrientes ecuatorianas más los efectos antropogénicos en el clima den como resultado el periodo más caluroso jamás registrado por la Organización Meteorológica Mundial.
Con información de AFP.