Desde el Servicio Meteorológico Nacional advirtieron que las imágenes satelitales del fin de semana evidencian que volvieron a observarse las columnas de humo en la provincia de Formosa y en el Delta del Paraná.
Asimismo, se puede ver tierra y sal en suspensión en la laguna de Mar Chiquita debido a los intensos vientos que afectaron la región.
Recomendaciones
Es necesario remarcar que el cambio climático facilita las condiciones para los incendios. Ello se debe a que los cambios en la temperatura o las mayores sequías propician la propagación del fuego, por lo que resulta imprescindible extremar los recaudos.
Es por esto que se recomienda:
No encender nunca fuego fuera de los lugares habilitados.
No arrojar colillas de cigarrillos encendidas ni fósforos en lugares en los que pueden ocasionarse incendios.
Emplear calentadores.
Llevarse consigo los residuos. Las latas y los vidrios pueden actuar de lupa y provocar incendios.
Si hay mucho viento, no encender fuego aun en sitios autorizados.
Consultar el índice meteorológico de peligrosidad de incendio.
No quedarse en el lugar durante un incendio, ponerse a salvo lo más lejos posible y despejar los caminos.
Cabe destacar que, en caso de visualizar humo se debe dar aviso de inmediato a las autoridades locales. El tiempo es un factor clave para combatir el fuego.
¿Por qué se incendian los bosques?
Los incendios forestales pueden producirse por causas naturales, como la caída de rayos producidos por tormentas eléctricas, principalmente cuando estas no son acompañadas de lluvia. Otra causa que puede producir incendios en algunas regiones es la actividad volcánica.
Asimismo, se producen por causas antrópicas. Es decir, la presencia del hombre en los montes, bosques o en sus adyacencias, inevitablemente va acompañada de elementos, quehaceres o instalaciones que pueden ocasionar incendios, ya sea por negligencia (fogón mal apagado) o fuegos intencionales para deforestar.
Los accidentes, el uso del fuego para quemas de desperdicios, limpieza de terrenos o preparación de sitios para forestación, agricultura, ganadería o urbanización, así como los fuegos hechos para recreación (en campamentos y fogones) o el vandalismo son algunas de las causas más comunes.