Por una iniciativa de la Fundación Cultural Cebil, estudiantes, docentes, artistas y vecinos del barrio El Huaico se unieron en la creación de un mural que celebra la biodiversidad local y fomenta la conciencia ambiental.
El barrio El Huaico se convirtió en un lienzo vivo dentro del proyecto “Ciudad de los Pájaros”. La iniciativa es impulsada por la Fundación Cultural Cebil y ha unido a estudiantes, docentes, artistas y vecinos en la creación de un mural que celebra la biodiversidad local y fomenta la conciencia ambiental.
Un lienzo que cobra vida
Durante el segundo día de pintura, el mural comenzó a tomar forma, revelando una explosión de color y detalles que dan vida a las múltiples especies de aves y árboles de la región. Los estudiantes del colegio Batalla del Bicentenario y del profesorado de artes Tomás Cabrera han plasmado en la pared sus diseños, llenos de creatividad y sensibilidad. “Buscamos completar estos detalles y luego añadir la diversidad de aves que también se plasmaron en los bocetos”, explicó Iñaki Morón, coordinador del proyecto.
Más que un mural, un puente entre arte y comunidad
“Ciudad de los Pájaros” no es solo una obra de arte, sino un espacio de encuentro y diálogo entre diferentes sectores de la comunidad. “Queremos escuchar las propuestas de los vecinos respecto al cuidado del medio ambiente y reflejarlas en este mural”, afirmó Morón. La jornada de pintura atrajo la atención de numerosos vecinos, quienes se mostraron entusiasmados con el proyecto y expresaron su interés por iniciativas similares.
Aprendizajes y desafíos
Para los estudiantes de profesorado, participar en este proyecto ha sido una experiencia enriquecedora. “Participar en el mural me dejó el trabajo en equipo, la cooperación también, que entre todos ayudamos para que este proyecto siga adelante”, comentó Samantha Chungara, estudiante de tercer y cuarto año del profesorado de artes visuales. Sin embargo, también enfrentaron desafíos, como adaptar los bocetos a gran escala y coordinar el trabajo en equipo.
Amalia Oviedo, otra estudiante de profesorado, destacó la importancia de esta experiencia para su futura práctica docente: “Puede influir de la manera en que nosotros planteamos las cosas y podemos llegar a realizar mejores cosas con los alumnos, como proyectos como este”.
Un llamado a la conciencia ambiental
El mural “Ciudad de los Pájaros” no solo embellece el barrio, sino que también sensibiliza a la comunidad sobre la importancia de preservar la biodiversidad y el cuidado a la madre tierra. “Cuando hicimos entre todos los bocetos, empezamos a investigar los tipos de aves, conocíamos lo típico, como el hornero, pero cuando nos plantearon este tema, con todo mi grupo empezamos a concientizarnos más, a averiguar qué tipo de árboles había, un poco de la zona donde vivimos, cómo era antes, cómo es ahora”, señaló Chungara.
Fernando Belton, profesor de pintura, destacó la importancia de conectar a los estudiantes con su entorno y fomentar la conciencia ambiental: “Yo creo que los chicos, desde un primer momento, los alumnos hicieron propia esta experiencia, la necesidad de tomar conciencia también sobre estas cuestiones que tienen que ver con el propio hábitat, con la comunidad barrial y con ellos mismos”.
Un futuro más verde
El proyecto “Ciudad de los Pájaros” es un ejemplo de cómo el arte puede ser una herramienta poderosa para generar conciencia y promover el cambio. Al unir a diferentes actores de la comunidad, se ha creado un espacio de diálogo y reflexión sobre la importancia de cuidar nuestro entorno.
Fuente: Fundación Cebil