¿De quiénes depende el equilibrio ecológico?

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La fauna mamífera de Tucumán mantiene un rol protagonista para mantener el ecosistema, y a la salud ambiental.

La provincia de Tucumán, con su variada geografía que abarca desde las selvas de las yungas hasta las serranías y montes, es hogar de una importante diversidad de mamíferos autóctonos. Estos animales desempeñan roles esenciales en el mantenimiento de los ecosistemas, contribuyendo a la biodiversidad y salud ambiental.

La reciente viralización de la publicación de un tucumano de Tafí Viejo, responsable de la caza de siete corzuelas preñadas causó indignación. Ante esto, te contamos cuáles son algunos de los mamíferos más representativos de la fauna local a quienes debemos proteger.

Tapir americano

El tapir (Tapirus terrestris) es uno de los mamíferos más grandes de la región y actúa como un dispersor natural de semillas. Al alimentarse de frutas, hojas y brotes, transporta y deposita semillas a grandes distancias mediante sus excretas, facilitando la regeneración de la vegetación y la conectividad de los bosques.

Su actividad ayuda a mantener la estructura y diversidad del bosque en las yungas. El proyecto Tapir sostenido por la Universidad Nacional de Tucumán y la reserva Horco Molle, busca la reintroducción de la especie, extinta hace 70 años. Hace un par de años, desde el proyecto se lamentaban que Suyana, una tapir hembra reintroducida, había sido cazada.

Tapirus terrestris

Oso melero

Especializado en consumir termitas y hormigas, el oso melero (Myrmecophaga tridactyla) controla la población de estos insectos, evitando que causen daños excesivos a la vegetación. Además, al excavar en el suelo en busca de alimento, contribuye a la aireación del suelo, mejorando su calidad y favoreciendo procesos naturales de reciclaje.

Es común que aparezca en la zona de Yerba Buena. Se recomienda no acercarse a tocarlo, y llamar a la Dirección de Flora y Fauna de la provincia.

Myrmecophaga tridactyla

Puma

El Puma concolor es un gran felino depredador tope que regula las poblaciones de herbívoros como corzuelas y roedores. Controlar estas poblaciones evita la sobreexplotación de la vegetación y mantiene el equilibrio trófico del ecosistema.

La presencia del puma indica un ecosistema saludable y funcional. Habita en distintos puntos de la provincia, sobre todo en el pedemonte, aunque se ha registrado la presencia del puma en zonas de llanura.

Puma concolor

Gato montés

De menor tamaño que el puma, el gato montés o Leopardus geoffroyi es un carnívoro que también controla poblaciones de pequeños mamíferos y aves. Su rol predatorio contribuye a mantener la diversidad y estabilidad de las comunidades animales.

Leopardus geoffroyi

Corzuela

Este pequeño ciervo (Mazama gouazoubira) se alimenta de brotes, hojas y frutos, actuando como dispersor de semillas y favoreciendo la regeneración natural de los bosques. Además, su actividad como herbívoro ayuda a moldear la vegetación y a crear espacios abiertos que benefician a otras especies.

Mazama gouazoubira. Foto: Martín Caiazza

Tatú carreta

Este armadillo gigante, el Priodontes maximus, es un ingeniero del ecosistema, ya que sus excavaciones y movimientos en el suelo contribuyen a la aireación, mezcla de nutrientes y creación de microhábitats para otros organismos. Además, se alimenta de insectos y pequeños invertebrados, ayudando a controlar sus poblaciones.

Priodontes maximus

La protección de estas especies es vital para conservar la riqueza biológica y la funcionalidad de los ecosistemas tucumanos. Conservar su hábitat natural y fomentar políticas ambientales sostenibles es una responsabilidad colectiva que asegura el bienestar de la naturaleza y las futuras generaciones.

En caso de aparición de alguno de estos animalitos, se recomienda no interferir en su trayecto, respetar su espacio de circulación, y en caso de encontrarlos en la zona de la ciudad, llamar a la Dirección de Flora y Fauna de Tucumán (0381 – 4218150 y 4210749).

Fuente: El Tucumano