Especialistas determinaron 81 puntos estratégicos del Océano Atlántico Sudoccidental en donde son necesarias mayores medidas de protección. Tres de estos puntos están en el país: Mar del Plata-Mar Chiquita, El Rincón-Patagonia Norte y Península San Julián, donde habitan especies críticamente amenazadas como el escalandrún y el gatuzo.
La UICN (Unión Internacional para Conservación de la Naturaleza), a través de su proyecto ISRA (Áreas Importantes para Tiburones y Rayas, por su sigla en inglés), lanzó una actualización de su Atlas de puntos cruciales para la conservación de tiburones, que por primera vez incluye el área del Océano Atlántico sudoccidental.
Con la colaboración científica de más de 190 expertos de Sudamérica y otras partes del mundo, se identificaron 81 áreas ISRA, dos candidatas a ISRA y 25 Áreas de Interés, en base a criterios biológicos y ecológicos.
La organización de conservación de la naturaleza WCS Argentina, junto con Administración de Parques Nacionales, la Comisión de Investigaciones Científicas de la Universidad Provincial del Sudoeste (CIC-UPS) y otras organizaciones, contribuyeron con información científica para definir tres de las áreas del país. Estas son Mar del Plata-Mar Chiquita, El Rincón-Patagonia Norte y Península San Julián, donde habitan especies amenazadas como los tiburones cazón, escalandrún, bacota, gatuzo, gatopardo, la raya marrón y el pez ángel espinoso.

Amenazados
Los tiburones, rayas y quimeras pertenecen a la categoría de “condrictios”, peces que se caracterizan por tener esqueleto de cartílago en lugar de hueso. Se trata del grupo de vertebrados marinos más amenazado del mundo debido al exceso de presión pesquera para su consumo como carne, sopa de aleta, aceite y otros usos comerciales. Por su lento crecimiento, reproducción sexual tardía y baja fecundidad, sus poblaciones no logran equilibrar y recuperarse de la intensa explotación a la que están expuestos.
En el Mar Argentino hay 105 especies de condrictios, de las cuales 55 son tiburones, que viven o migran en distintas épocas del año. Muchas de ellas están en riesgo de extinción.
Ciencia para conservar
“El Océano Atlántico Sudoccidental es una zona de especial preocupación para la conservación de estas especies y la definición de áreas específicas donde habitan, se alimentan o reproducen es esencial para que se puedan mejorar las medidas de protección existentes”, señala Juan Martín Cuevas, coordinador de conservación de rayas y tiburones de WCS Argentina y uno de los especialistas que participó en la identificación de las ISRA.
“Como investigadores, pudimos contribuir con datos específicos y actualizados que obtuvimos en casi 15 años trabajando en conjunto con pescadores del Mar Argentino; incluso uno de ellos que colabora en uno de nuestros proyectos aportó su vasta experiencia y figura como autor de una de las áreas del Atlas”, agrega.

Además de realizar investigaciones científicas, desde el 2013 WCS Argentina acompaña el programa de ciencia ciudadana “Conservar Tiburones en Argentina”, junto al Museo de Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de La Plata y el Museo Argentino de Ciencias Naturales Bernardino Rivadavia. La iniciativa alienta a los pescadores deportivos a generar un cambio de paradigma a través de dos propuestas principales: por un lado, pasar de la pesca con sacrificio a la pesca con marcado y devolución al mar; y por el otro, contribuir al relevamiento de información clave para la conservación de estas especies.
Se estima que lograron más de quince mil devoluciones de tiburones, de los cuales más de 3.300 poseen marcas para su monitoreo y 34 fueron recapturados. Este programa incluye acciones de capacitación y concientización, así como la entrega de marcas y anzuelos circulares, claves para la pesca y devolución de los individuos.
Zonas críticas
En Argentina se definieron más de 20 áreas y dentro de ellas, WCS Argentina contribuyó con información científica y datos provistos por pescadores deportivos que participan en el proyecto Conservar Tiburones en Argentina para impulsar dos en la Provincia de Buenos Aires: Mar del Plata-Mar Chiquita y El Rincón-Patagonia Norte.
El área denominada Mar del Plata-Mar Chiquita se extiende por 559,7 km² y abarca aguas desde la costa frente a la ciudad de Mar del Plata hasta Mar Chiquita al norte. La zona se caracteriza por aguas de baja visibilidad, sustratos rocosos y corales blandos. Allí se encuentran especies amenazadas como los tiburones escalandrún y bacota.
El caso del escalandrún es alarmante: disminuyó más del 80% en las últimas siete décadas y está catalogado como Críticamente Amenazado de acuerdo con los criterios de la UICN, por lo que enfrenta un riesgo de extinción extremadamente alto en estado silvestre.

El Rincón-Patagonia Norte es un área de 13.966 km² que abarca la Bahía Anegada, parte de Bahía Blanca y la costa de Claromecó. Se caracteriza por aguas estuarinas con variaciones estacionales en su extensión debido a la fuerza de las mareas y la acción del viento. Está influenciada por la descarga de varios ríos y su alta productividad. Dentro del área se encuentran especies vulnerables como gatuzo, raya marrón, pez ángel espinoso y gatopardo.
El gatuzo también está catalogado como Críticamente Amenazado desde el 2020 y según el Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP), es el tiburón con mayor explotación comercial en Argentina y su stock está sobrexplotado regionalmente desde el 2024.
“Muchas de estas especies son endémicas, esto quiere decir que habitan exclusivamente en esta región y si desaparecen en estas áreas, directamente se extinguirían”, señala Cuevas.
WCS Argentina también contribuyó en la identificación de la Península San Julián, ubicada en la Provincia de Santa Cruz, como un Área de Interés para la conservación de tiburones y rayas, aunque todavía no se cuenta con suficiente información para cumplir con los criterios y ser declarada como ISRA.
Fuente: WCS Argentina